El recién reelegido presidente del Cabildo de Tenerife, Pedro Martín (PSOE), ha anunciado en el debate de toma de posesión que renuncia a la Presidencia para facilitar un cambio de poderes “ordenado” a CC y PP, que tienen un acuerdo de gobernabilidad para hacer presidenta a la nacionalista Rosa Dávila.
Martín ha recalcado que su intención es “favorecer un tránsito de poderes ordenado” y ha ofrecido su disposición y la de su partido para “colaborar en este proceso de cambio de poderes” y para trasladar a CC y PP cuanta información precisen.
“Tenerife no se puede parar”, ha señalado en su discurso, subrayando que en el PSOE son “respetuosos” con el pacto CC-PP pese a ser los más votados y por eso su intención es facilitar un tránsito de poderes “ordenado”, de ahí que se ofrezca a celebrar reuniones y colaborar para que el cambio se haga cuanto antes.
Martín ha comentado también que “Tenerife se enfrenta a grandes problemas pero a cambio, tiene los mejores datos de empleo en 15 años, un sector turístico muy potente y un sector primario que ha contado cada año con más presupuesto porque es estratégico para la isla”.
Sobre las carreteras ha destacado el “trabajo de colaboración” con el Gobierno de Canarias para sacar adelante varios proyectos, poniendo como ejemplo el túnel de Erjos que cierra el anillo insular por el oeste. Lo mismo ha destacado con Aena, lo que asegura que permitirá “potentes inversiones” para ampliar y mejorar los dos aeropuertos de la isla.
Martín ha valorado también la gestión de su Gobierno en materia de aguas residuales, en protección del medio ambiente y en aumento de las energías renovables, más del doble del periodo anterior, y resaltado igualmente las políticas sociales, con más presupuesto y más respuestas a las distintas demandas de la sociedad. Ha incidido en las valoraciones de “sobresaliente” a la transparencia y la participación ciudadana y ha advertido de que Tenerife “solo saldrá adelante” si no se deja a ningún municipio ni territorio “atrás”.
“Una oportunidad para cambiar las cosas”
Rosa Dávila (CC), futura presidenta de la institución, ha valorado el recorrido histórico de la corporación y las distintas formas de gobernar de los distintos partidos políticos, y en esa línea, ha defendido el “entusiasmo, pasión y ganas” de los nacionalistas.
Ha indicado que se abre en este mandato “una oportunidad para cambiar las cosas” y diseñar un Cabildo con “alma, corazón y cabeza”, que lidere el avance de la isla junto a ayuntamientos y colectivos, “cerrando filas” por Tenerife.
Así, ha dicho que en el Cabildo “pesa más la cultura del consenso” que las diferencias y la isla precisa de “grandes acuerdos” por lo que ha tendido la mano a todos los grupos. Ha señalado que los tinerfeños quieren “estabilidad” y un grupo de gobierno “fuerte y fiable”, con una mayoría que garantice “fortaleza”. “Eso es lo que han votado y es lo que van a tener”, ha agregado, al tiempo que ha resaltado que la isla “está por encima de todo”, de siglas y partidos.
Lope Afonso (PP), que será vicepresidente del futuro gobierno insular, ha comentado que el PP viene “a construir Tenerife entre todos y para todos” y para ello defiende un proyecto que “cumpla las expectativas” de los ciudadanos y que ha sido el que más ha crecido electoralmente.
Ha ofrecido “entrega y humildad” en este mandato y el “compromiso irrenunciable” con la libertad y ha insistido en que “hay que entender” el mensaje que lanzaron los ciudadanos en las elecciones, que los políticos se alejen de “la crispación y la polarización” y aboguen por la “altura de miras”.
“Ha llegado el momento de trabajar para resolver los grandes problemas de Tenerife, que el Cabildo sea de todos e implique a todos los ayuntamientos de la isla, del norte y del sur, caminando hacia una isla de oportunidades”, ha comentado Afonso. Además, ha insistido en reclamar la “política útil”, poniendo como ejemplo la labor de consenso del pasado mandato, y ha apelado a generar un “Cabildo vertebrador” que vincule a todos los ciudadanos de la isla.
Vox destaca valentía y esperanza
Ana Salazar, consejera de Vox, ha destacado la “valentía y esperanza” de sus 28.000 votantes pese a la “demonización” y el “apagón informativo” que han sufrido, subrayando que serán “útiles y eficaces” y aportarán “sentido común” a la defensa de los intereses de la isla.
Ha comentado que Vox defenderá a todas las víctimas “sean del sexo que sea” y a las familias canarias apoyando la educación que quieran darle, la “equidad” de todos los municipios “sin cordones sanitarios”, el tejido productivo y los servicios públicos.
Ha reconocido “diferencias” con el resto de grupos pero entiende que todos tienen el “objetivo común” de defender a Tenerife. “Trabajaremos con respeto y diálogo”, ha agregado, poniendo sobre la mesa que “el respeto” por los tinerfeños debe poner de acuerdo a todos los consejeros. “Tendrán la mano tendida de Vox”, ha agregado.